PANORAMA NAVIDEÑO
Hay poco que hacer con las reuniones navideñas que se repiten año tras año del mismo modo, con sus grandes tertulias donde sentados se come y bebe sin alternativa al movimiento físico. Es entonces el momento en que el dibujo estimula a la imaginación y la acompaña a otro lugar más colorido donde, lejos de creencias en fiestas antiguas, uno sueña con colores, bailes y celebraciones nuevas. No hay en esto nada personal con la maravillosa gente que comparte la mesa, pero, mientras la tradición no se reinvente, el único panorama posible, seguirá siendo un desierto de cubertería y cristalería impoluta.
ENTRE LIBRETAS
"Mirando al Mar".
No hay comentarios:
Publicar un comentario